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6 de agosto de 2014

Protectores Solares

Para defenderse de las agresión de la radiaciones, la piel posee mecanismos de adaptación y defensa, sin embargo, estos mecanismos de protección natural son insuficientes, debiéndose recurrir a fotoprotecciones artificiales; ropa, sombrillas, gafas y protectores solares.

La  utilización correcta de los protectores ha de prevenir de los efectos adversos de la radiaciones, principalmente las quemaduras, retrasar el fotoenvejeciminto cutáneo y evitar la aparición de alergias y canceres de piel.

La mayoría de los Protectores solares son productos cosméticos (tópicos o sistémicos) que contiene filtros que “detienen” ALGUNAS de las radiaciones solares protegiendo al a piel de los efectos dañinos de las mismas.

En el envase de estos protectores solares aparece el Factor de Protección Solar (FPS) en valores que varían entre 2 y 50. Este sistema numérico se usa para valorar, principalmente, la cantidad de protección que el producto ofrece contra las quemaduras solares causadas por los rayos UVB. Sin embargo, todavía no se ha establecido un sistema de valoración oficial o recomendado para evaluar la protección contra los rayos UVA o infrarrojos, los cuales parecen estar relacionados con el fotoenvejecimiento cutáneo . La legislación cosmética solamente obliga a que la protección UVA sea, como mínimo, de un tercio con respecto a la UVB.

Por tanto, el FPS nos informa sobre  del tiempo que se puede permanecer expuestos al sol sin riesgos de quemarnos  y por tanto indica la protección frente al UVB. Para hacer un uso adecuado de una protección solar podemos simplificar que el FPS multiplicado por 2 son los minutos frente a los cuales podemos tener una exposición intensa al sol con total protección y a partir de estos el porcentaje de protección comienza a disminuir paulatinamente. Por ejemplo: si vamos a la playa con una protección con FPS de 20, para estar completamente protegidos debemos echarnos cada 40 minutos y si queremos ponernos morenos sin riesgo de quemadura podemos echarnos cada 60 minutos. 


Aunque no hay una regla absoluta para escoger un factor de protección solar apropiado, hay que tener en cuenta una serie de factores:
    A quién va dirigido: niños, adultos ...
    Zona de aplicación: cuerpo, cara, calva, ...
    Tipos de piel: normal (formulación en crema o cremi-gel), seca (aceite), grasa (gel).
    Hora del día
    Altitud
    Lugar geográfico
    Estación del año
    Fototipo cutáneo:es la capacidad de adaptación de la radiación solar que tiene cada persona desde que nace. Están clasificados en  6 tipos (I -VI) determinados en función de una serie de variables referentes al físico como del tono de la piel (no expuesta al sol), del color del cabello, los ojos y los pezones, de la presencia o no de pecas y de la tendencia a las quemaduras o al bronceado. Cuanto menor sea su fototipo (fototipo III, y sobre todo fototipos I y II) más elevado tiene que ser el fotoprotector que debe utilizar. Se recomienda FPS 50 para el  fototipo 2  y 30 para el Fototipo 3-4.
                                   

                                        Calcula tu Fototipo: Test 1.    Test 2.


¿En la sombra o bajo una sombrilla hay que utilizar protección solar?
 Las radiaciones solares se reflejan en la arena.
¿Cuándo la piel está bronceada hay que seguir protegiéndola?
El bronceado natural tiene una capacidad de protección pequeña frente al UVB y ninguna frente a los efectos de las radiaciones UVA.
¿En días nublados es necesario utilizar un protector solar?
 Las radiaciones atraviesan en un 90% las nubes.
¿Las radiaciones solares atraviesan los cristales?
Fundamentalmente las radiaciones UVA.
¿El sol es igual de nocivo todos los días y a todas las horas? NO
Aunque las radiaciones UVA son más constantes, las radiaciones UVB varían, siendo más intensas en periodo de primavera y verano, y entre las 12 y 16 horas oficiales.
¿Necesitamos las radiaciones UV del sol?
Es la responsable de la producción de una gran cantidad de la vitamina D3 en el cuerpo.

Recomendaciones:
·       Utilizar el protector adecuado para cada tipo de piel (fototipo), edad y  las condiciones ambientales (estaciones del año, diferentes altitudes …).
·         Aplicar el protector por todo el cuerpo 30 min antes de la exposición solar.
·         Aplicar el protector después de cada baño y sudoración excesiva sobre la piel SECA.
·     Extremar las precauciones en las partes del cuerpo más sensibles (lunares, cicatrices, empeines, calva…).
·         Evitar tomar el sol al medio día (13:00 – 16:00).
·      Se recomienda no usar protectores solares antiguos,  ya que una vez abiertos comienzan a perder cualidades protectoras.
·         Evitar el uso de  colonias y desodorantes que puedan dar lugar a manchas  en la piel.
·      Evite el uso de medicamentos fotosensibilizantes ( Ibuprofeno, Omeprazol…) pues pueden provocar quemaduras.
·     Adicionalmente te recomendamos que utilice cremas hidratantes después de cada exposición solar para mantener tu piel hidratada y prolongar el color adquirido.


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